De acuerdo a las estadísticas, si aplastás el cigarrillo con asco no se apaga de una. Pasó eso. Puteé por lo bajo y mi sobrino -el de 8- me arrancó el cenicero de las manos y se fue a la cocina.
-Así tenés que hacer- Me dijo. Abrió un poco la bolsa de la basura que yo me había olvidado de sacar y la emprendió contra el cenicero de madera con una esponja patito. Me quedé mirándolo ¿Tanto asco te va a dar el cigarrillo para lavar el cenicero durante quince minutos? Pero como soy la tía y por lo general no voy en contra de él me encogí de hombros y me puse a limpiar la cocina. Desde que me mudé, era la primera vez que se quedaba en casa. Arrancó con un sincericidio:
-¿Cuál fue la cagada más grande que te mandaste?-
-¿Pero vos decís travesura o hacer algo malo?
-Las dos cosas.
Pensé, pensé, pensé y me decepcionó darme cuenta de que no fui muy problemática de chica. Cuando lo hice soltar el cenicero logró sorprenderme:
-¿Vamos a ver las estrellas?
-Dale, vamos al balcón.
-No, a ver las estrellas.
-Por eso.
-No sabía que se llamaba balcón.
-No tenías por qué saber.
¿Por qué fumás? ¡No fumes más! ¿Por qué te peleaste con tu otro novio? ¡Ah, era un estúpido, quería tener dos novias! ¿Pero vos cómo le dijiste que no querías estar más con él? ¿Y cómo le dijiste al abuelo que tenías un novio? ¡Yo quiero que vuelvas a vivir a casa, yo te extraño!
Bueno, ¿querés comer yogur con cereal?
Miró el recipiente de vidrio: -¿Lo hiciste vos?
-Sí.
Después de probarlo:
-Está mejor que el original!
Terminamos de comer y me puse a barrer los cereales que había caído al piso. ¿Y qué veo? Un gusanito. Y al lado, otro. Y al costado, más. Y en el escobillón, otros. La bolsa de basura que me había olvidado de sacar durante dos días seguidos y que el pendejo abrió cuando tiró las cenizas había eyectado gusanos. Puse la bolsa adentro de otra bolsa, adentro de una bolsa de cartón, adentro de otra bolsa común. No sirvió de contención: a los quince minutos la bolsa temblaba y dejaba traslucir el movimiento de los gusanos. Eran las 3 AM pero fuimos a sacar la basura.
-¿A esta hora salen todos a robar?- Me susurró. A mí se me ocurrió que si pasaba un patrullero y me veían sacando la basura a esa hora con un nene de la mano me detienen para buscar el torso de alguien en la bolsa. Pero la policía no vino, y una vez adentro del edificio levantamos los brazos en gesto de triunfo. Para no dejarlos con la imagen de los gusanos, ahí va otro dialoguete.
-¿Y la nena que te gustaba?
-No sé, no la veo hace un montón. Debe estar mirando televisión... como Celeste, todo el día mirando la televisión...
Festejen de lo lindo y buen brindis
martes, 30 de diciembre de 2008
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9 comentarios:
Los pibes son brutalmente honestos, a veces un poco exagerados nomás.
Buen año Quichi!
beso
A
En la Argentina de Perón, y antes de los abogados Saenz Peña y más antes de Manuel Belgrano, siempre lo chicos y los viejos eran los privilegiados por honestos. Álguna vez volverán esos tiempos. Beso Quichi y un excelente año nuevo para vos y los tuyos
Jajaj que blog pelotudo
eso de "¿y la nena que te gustaba?" ¿lo preguntó él o lo preguntaste vos?
Se lo pregunté yo… y seguro que no le dije nena sino chica
Pero una vez estábamos mirando la tele y me preguntó ¿Todos son gay?
qué grosa!
quichi, gracias por la aclaración!
¿todos moderan los comenarios?
yo pensaba que los moderaban los famosos nomás...
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